Buena observación de Jason Kottke:
La posibilidad de usar el iPhone con una sola mano no es uno de los principales factores que ayudan a venderlo, pero sí que es una de esas pequeñas funcionalidades que uno aprecia con el tiempo y que acaba haciéndose casi indispensable. Es un dispositivo portátil permanentemente conectado, con el que se puede jugar, que puede usarse fácilmente con una sola mano y en una sorprendente variedad de situaciones.
El manejo de un dispositivo con una sola mano era algo imposible con sistemas que usan lápiz.