Lo mismo que ha ocurrido con la tienda de Londres — tiendas enormes y caras que no han conseguido generar suficientes ventas. Chris Ziegler escribe lo siguiente para Engadget:
En nuestra opinión, el objetivo de estas tiendas nunca fue conseguir ventas; su cometido era que el público conociera a Nokia (y viceversa), en un ambiente elegante y moderno; no importa la opinión que uno tenga de sus teléfonos, la empresa ha conseguido su objetivo con la estrategia de apertura de estas tiendas.
¿Qué clase de tienda no tiene como objetivo vender? Es como decir que tienes un bolígrafo cuyo cometido no es escribir.