Una excelente crítica de Alexander Murphy (un pseudónimo que oculta la identidad de un director de efectos visuales de Hollywood) en la que explica lo que hay de malo en las recientes películas de acción real en 3D que no son Avatar — se convirtieron en “3D” en postproducción en lugar de haberse filmado en 3D real con cámaras dobles. Ni siquiera me gustó Up en 3D, y no era acción real. La única película en 3D que he visto en la que el 3D mejoró la experiencia en vez de empeorarla ha sido Avatar. (Algunas de las atracciones en 3D de Disney World también están bien).