John Paczkowski entrevista a Chuck Geschke, cofundador de Adobe

John Paczkowski publicó el viernes una fantástica entrevista al copresidente de Adobe Chuck Geschke, en la que hablaba sobre la campaña de Adobe contra Apple. La entrevista saca a relucir las diferencias filosóficas entre Adobe y Apple mucho más claramente que el ensayo titulado “Thoughts on Open Markets” (reflexiones sobre los mercados abiertos) que Geschke y el otro cofundador John Warnock publicó el jueves.

Veamos algunos fragmentos de interés:

John Paczkowski: ¿No debería tener Apple derecho a definir los medios que se pueden usar para crear las aplicaciones para su propia plataforma?

Chuck Geschke: Desde luego que tienen derecho. Nadie dice lo contrario.

JP: Las aplicaciones móviles multiplataforma no suelen aprovechar las funciones nativas exclusivas de cada dispositivo. ¿Qué piensa sobre las quejas de que el software multiplataforma produce aplicaciones de baja calidad?

CG: Bueno, nadie dice tal cosa de Photoshop. Desde luego no lo dicen de Acrobat… No estoy muy seguro de cuáles pueden ser los ejemplos reales de eso.

No sé si Geschke está mintiendo o si realmente cree que los usuarios de Mac no tienen desde hace tiempo quejas importantes sobre la calidad y el diseño de interfaz de Photoshop (y toda la colección de programas CS). ¿Y Acrobat? Los usuarios de Mac odian Acrobat. Si no fuera por el programa Vista Previa creado por Apple (y la implementación del formato PDF creada por Apple para Mac OS X), los usuarios de Mac odiarían del todo el formato PDF.

 

Se puede decir, no sin cierta razón, que para Adobe tiene un gran interés comercial publicar la colección de programas CS en las dos plataformas, Mac y Windows (o quizás mejor dicho Windows y Mac). Y se puede afirmar que hace una década, cuando el Mac estaba en su punto más bajo, que esta estrategia comercial tenía aún más sentido, y que una vez comprometidos con esta estrategia, no le resulta fácil a Adobe abandonarla. Pero decir que su estrategia multiplataforma no ha influido negativamente en la calidad de las aplicaciones de Adobe para Mac es pedirle a quienes usamos estas aplicaciones que ignoremos toneladas de pruebas que demuestran lo contrario. Espero por el bien de Adobe que Geschke esté fingiendo al hablar de esto; de lo contrario, ni más ni menos que el copresidente de la junta directiva de la empresa ignora por completo la opinión que muchos usuarios de Mac tienen de sus productos estrella. Las aplicaciones de la Creative Suite han evolucionado hasta parecer aplicaciones de de Adobe, no aplicaciones de Mac o Windows.

Lightroom, sin embargo, habría sido un estupendo ejemplo que Geschke podría haber citado. Me encanta Lightroom, y si no supiera ya que es una aplicación multiplataforma para Mac y Windows, nunca lo podría adivinar usando la versión para Mac. No dudaría en afirmar que Lightroom es la mejor aplicación multiplataforma jamás creada. Pero Geschke no dijo Lightroom, dijo Photoshop y Acrobat.

JP: ¿Entonces no piensa que las herramientas de desarrollo multiplataforma impliquen limitaciones?

CG: La verdad es que no. Quiero decir que puede que haya ciertas funciones en ciertas plataformas para las que uno tenga que hacer programación a medida, pero cuanto más se va por ese camino más se tiene la experiencia que da el HTML en la Web, en la que el tipo de navegador, el hardware y el sistema operativo determina cómo es la experiencia de uso. Eso es porque el HTML no está bien sistematizado ni estandarizado y cada cual crea su propia implementación.

Resultaría más creíble si Geschke admitiera que se hacen concesiones importantes en el desarrollo multiplataforma. Por supuesto, se puede afirmar que estas concesiones merecen la pena — que resulta beneficioso que versiones tremendamente parecidas de aplicaciones como Photoshop e Illustrator funcionen en Mac OS X y Windows. Pero no resulta creíble fingir que estas concesiones ni siquiera existen.

La postura de Apple es que permiten el uso de dos plataformas en iPhone OS: (1) su propia plataforma, controlada y cerrada: el App Store y Cocoa Touch; y (2) una plataforma accesible a todo el mundo, sin controles y totalmente abierta: HTML5. Apple es la primera en admitir que el App Store es cerrado, y la plataforma abierta que apoyan se basa en unas especificaciones creadas por organizaciones muy respetadas dedicadas a la creación de estándares como WHATWG y el W3C. Si, como asegura Geschke, el HTML no está “estandarizado”, ¿entonces cómo son estas especificaciones creadas por organizaciones dedicadas a los estándares abiertos?

Uno puede defender que los motores de rendering no son coherentes en términos de cómo representan visualmente los estándares HTML (aunque decir tal cosa casi con seguridad implica que te refieras a problemas prácticos con Internet Explorer), y también se puede decir (con razón) que muchos desarrolladores web no se ajustan a los estándares en el código que crean, pero no creo que se pueda afirmar que el HTML no está “estandarizado”.

Sin duda hay muchos compromisos asociados al desarrollo web en cuanto a llas diferencias entre navegadores, sistemas operativos y dispositivos. En cierto modo, dispositivos móviles capaces de navegar por la web, como los que usan iPhone OS y Android, a pesar de que sus navegadores basados en WebKit se cuentan entre los que más cumplen los estándares en toda la industria, han hecho que el desarrollo web sea más complejo que nunca, porque además de diferencias entre los motores de rendering, han añadido nuevos elementos de complicación, incluyendo pantallas extremadamente pequeñas y procesadores muy lentos, comparándolos con los ordenadores “normales”. Pero ese es el resultado inevitable de tener una plataforma realmente abierta que no es propiedad ni está controlada por ninguna entidad. Básicamente, el problema del HTML y el desarrollo web es que está muy estandarizado.

Eso es lo hermoso de sistemas como iPhone OS y Android (y Windows y Mac OS X, ya puestos) — que tienen ambos sistemas. Una API nativa de programación controlada y definida por el creador de la plataforma, y soporte completo para la web abierta. Incluso la web no llega a permitir en muchos casos la flexibilidad del enfoque de “programar una vez, ejecutar en cualquier sitio”, pero la parte de “ejecutar en cualquier sitio” es totalmente cierta, y esa, más que cualquier otra cosa, es la razón por la que la web es tan fantástica y tan apreciada por todo el mundo.

Flash se asocia con los navegadores web porque durante la última década la mayoría de los navegadores web en uso han incluido el plugin de Flash Player. Pero Flash no es parte de la web. Está en la web, pero no pertenece a la web. Adobe presenta Flash como un homólogo de HTML, JavaScript y CSS, cosa que no es cierta.

JP: ¿Por qué Flash no es un estándar abierto?

CG: Sí que lo es. ¿A qué se refiere?

JP: Flash es un software privativo de Adobe. No es de código abierto. Lo diré de otro modo: ¿Por qué Flash no es un estándar abierto controlado por una entidad dedicada a los estándares abiertos?

CG: En cuanto Adobe adquirió Macromedia, publicamos abiertamente el formato SWF y eliminamos la exigencia de que hubiera que tener una licencia para usarlo… No, aún no hemos puesto Flash en manos de una entidad dedicada a los estándares, como ya hemos hecho con PDF y Postscript. Pero no me sorprendería ver que algún día lo hagamos cuando tenga sentido hacerlo.

Con los estándares que hemos creado y abierto a todo el mundo, hemos hecho todo lo posible por que lleguen a ser suficientemente maduros para que no sufran los efectos de un diseño en comité. Si te fijas en la cantidad de tiempo que hará falta para que HTML5 llegue a ser una plataforma razonablemente sólida, va a costar mucho tiempo porque hay una barbaridad de intereses que pugnan por influir sobre su desarrollo.

Dicho de otro modo, Adobe mantiene tanto control como quiere sobre sus propias plataformas y formatos. Suena muy parecido a lo que Apple está haciendo con iPhone OS.