Rich Cannings, director de seguridad de Android:

En fechas recientes descubrimos dos o tres aplicaciones gratuitas creadas por un investigador y pensadas para realizar tareas de investigación. Estas aplicaciones mentían sobre su funcionamiento para animar a la gente a instalarlas, pero no se diseñaron para usarse con intención de causar daño, y no tenían permiso para acceder a datos personales — o a recursos de sistema más allá de permission.INTERNET. Puesto que las aplicaciones eran prácticamente inútiles, la mayoría de los usuarios las desinstalaron al poco tiempo de descargarlas.

Después de que el investigador retirara de forma voluntaria estas aplicaciones del Android Market, decidimos aplicar las Condiciones de Servicio de Android Market y usar nuestra función de eliminación remota de aplicaciones sobre las copias aún instaladas para completar la limpieza.

Esto prueba que sus sistemas funcionan como fueron diseñados. También demuestra que aunque el Android Market está mucho menos regulado que el App Store de Apple, tampoco es precisamente como el salvaje oeste.