Peter Bright es escéptico con el reportaje de Ed Bott que afirma que Microsoft tiene el control absoluto de las actualizaciones de Windows Phone 7:
Siempre que recibamos las acutalizaciones sin interferencias por parte del operador o el fabricante, aunque sea sólo a través de USB, sigue estando bien; nuestros teléfonos seguirán recibiendo las nuevas funciones y las actualizaciones para solucionar fallos.
Por desgracia parece que ni siquiera esto será posible: los operadores tendrán la capacidad de retrasar hasta cierto punto las actualizacione. Y lo que es peor, parece que Microsoft está haciendo todo lo que puede para no dar una respuesta sincera sobre la situación.