Spencer Webb:
Prácticamente cualquier teléfono fabricado actualmente tiene la antena en la parte inferior. Esto permite asegurarse de que la parte radiante de la antena esté lo más lejos posible de la cabeza. Apple no ha sido el primero en situar la antena en la parte inferior, y sin duda no será el último. El problema es que los humanos tenemos las manos por debajo de las orejas, así que la postura más natural para la mano es tapando la antena. Pero algo así no es una buena decisión de diseño, ¿verdad? ¿Cómo es que nos vemos enfrentados a esta situación? La culpa la tiene la FCC (Comisión Federal para la Comunicaciones).