Wired identifica al vendedor del prototipo de iPhone desaparecido

Brian X. Chen y Kim Zetter:

Brian J. Hogan, un vecino de Redwood City (California) de 21 años de edad, asegura que, aunque recibió un pago del sitio web especializado en tecnología Gizmodo, creyó que el pago era para conceder a Gizmodo acceso exclusivo al teléfono para estudiarlo. Gizmodo insistió en “que no había nada malo en compartir el teléfono con la prensa especializada”, según su abogado, Jeffrey Bornstein.

Así comienzan los intentos de Hogan de echarle toda la culpa a Gizmodo.

Entonces, un amigo de Hogan se ofreció a llamar al servicio Apple Care en nombre de Hogan, según explica el abogado de Hogan. Aparentemente hasta ahí llegaron los intentos de Hogan de devolver el teléfono.

Leedlo con atención. En primer lugar, Hogan nunca llamó a nadie, tampoco a Apple, para intentar devolver el teléfono. En segundo lugar, su amigo, según esta párrafo, “se ofreció a llamar al servicio Apple Care”. ¿Llegó su amigo a llamar realmente a Apple Care? No queda claro en el artículo de Wired si Hogan llegó a hacer algo para devolver el teléfono.

Su abogado asegura que hace poco cambió de universidad y que continuará con sus estudios universitarios en otoño. Ha trabajado a tiempo parcial en un centro comunitario gestionado por una iglesia dando clases de natación a niños, y el año pasado colaboró como voluntario en un orfanato en China mientras participaba en un programa de estudios en el extranjero.

“También ayuda voluntariamente con su tía y su hermana para conseguir fondos para su trabajo para proporcionar atención médica a huérfanos en Kenia”, afirma su abogado. “Brian es la clase de chico que cualquier padre estaría orgulloso de llamar hijo”.

La cosa ya pinta mal cuando tu abogado pide clemencia antes incluso de que te hayan acusado.