Josh Lowensohn e Ina Fried informan desde San Francisco:
Si Microsoft tiene esperanzas de volver a entrar en el juego de los smartphones, más les vale esperar que Windows Phone 7 tenga mayor efecto que el que aparentemente ha tenido en una tienda de AT&T en la ciudad.
A mediados del lunes la tienda había vendido menos de la mitad de sus 20 unidades de dispositivos con Windows Phone 7.
No es buena señal (visto a Shawn King).